Recetas mallorquinas con aceite de oliva: sabores auténticos de la isla

La cocina mallorquina es un verdadero homenaje a la sencillez, a los productos de la tierra y al aceite de oliva, ingrediente estrella que da vida y sabor a sus platos más emblemáticos. En Mallorca, el aceite de oliva no solo es un alimento, sino un legado cultural que ha acompañado a las familias generación tras generación, impregnando las cocinas con aromas intensos y matices mediterráneos inconfundibles.
Hoy te invitamos a descubrir tres recetas tradicionales mallorquinas donde el aceite de oliva virgen extra es el gran protagonista, realzando los sabores naturales y respetando la esencia de la isla.
1. Trempó: la ensalada de verano por excelencia
El trempó es probablemente una de las recetas más sencillas y frescas de la gastronomía balear. Un plato que habla de la huerta mallorquina y de las largas tardes de verano.
Ingredientes:
- 3 tomates maduros, carnosos y poco ácidos
- 2 pimientos blancos mallorquines
- 1 cebolla tierna
- Sal al gusto
- Un generoso chorro de aceite de oliva virgen extra Oli Solivellas
Preparación:
Lava y corta en dados pequeños los tomates, los pimientos y la cebolla. Mezcla todo en un bol y añade sal al gusto. El toque maestro es el aceite de oliva virgen extra, que convierte esta ensalada en un festival de frescura y sabor. Ideal como acompañamiento de una coca salada o un pescado a la brasa.
Clave del éxito: mucho tomate, algo de pimiento y poca cebolla.
2. Coca de trempó: la esencia de Mallorca en un bocado
La coca de trempó es la versión horneada del trempó. Una base de masa crujiente que se cubre con la mezcla de verduras y un buen chorro de aceite de oliva.
Ingredientes para la masa:
- 300 g de harina de trigo
- 100 ml de aceite de oliva virgen extra Oli Solivellas
- 100 ml de agua templada
- 1 pizca de sal
Ingredientes para el relleno:
- 3 tomates de ramallet
- 2 pimientos verdes
- 1 cebolla tierna
- Sal al gusto
- Aceite de oliva virgen extra
Preparación:
Mezcla la harina, la sal, el agua y el aceite hasta obtener una masa homogénea y elástica. Extiéndela sobre una bandeja de horno. Cubre la masa con la mezcla de trempó y añade sal y un buen chorro de aceite. Hornea a 180 ºC durante 30-35 minutos hasta que la base esté dorada. Un clásico que no puede faltar en cualquier celebración mallorquina.
3. Frit de Matances: tradición y sabor de la matanza
El Frit de Matances es un plato contundente y sabroso, elaborado con carne de cerdo, verduras y un buen aceite de oliva. Se solía preparar el día de la matanza del cerdo, un ritual ancestral en los pueblos de Mallorca.
Ingredientes:
- 400 g de carne magra de cerdo
- 300 g de hígado de cerdo (opcional)
- 2 patatas medianas
- 1 pimiento rojo
- 1 pimiento verde
- 1 cebolla
- 3 dientes de ajo
- 1 hoja de laurel
- Sal, pimienta y ramitas de hinojo
- Aceite de oliva virgen extra Oli Solivellas
Preparación:
Corta las patatas en dados y fríelas en abundante aceite hasta que estén doradas. Reserva. En la misma sartén, sofríe la carne y el hígado (si lo usas) junto con los ajos, la cebolla y los pimientos cortados en tiras. Añade la hoja de laurel, sal, pimienta y el hinojo. Cuando la carne esté hecha, incorpora las patatas y mezcla bien. Remata el plato con un chorrito de aceite de oliva en crudo antes de servir.